ENTREVISTA CON ALBERTO VÁZQUEZ
PROTAGONISTA DE “¿HACEMOS UN TRÍO?”, TODA UNA FIESTA TEATRAL
Entrevistamos a Alberto Vázquez, uno de los reyes del teatro musical que tenemos hoy en día en nuestro país.
Actualmente protagoniza junto a Marta Valverde y Natalia Millán el musical “¿Hacemos un trío?”, un musical lleno de color, alegría, luz, música, anécdotas, una amistad inquebrantable y mucha diversión que tras pasar por varios teatros y escenarios, sigue dando guerra y no piensa parar.
Alberto Vázquez ha trabajado en algunas de las series más queridas de nuestro país como “Cuéntame como pasó” o “Amar en tiempos revueltos”, ha actuado en musicales míticos como “My fair lady” o “Mamma Mía”, ha sacado al mercado un trabajo discográfico y ha montado su propia productora teatral entre otras variedades artísticas.
En Lunas Pasajeras nos reunimos con él para conocerle un poco mejor y también saber lo que opina de este momento teatral que está viviendo, sus gustos y muchos más secretos que no conocéis sobre él.
-¿Cómo nació este gran musical?
Surgió cuando estábamos Natalia Millán y yo haciendo “Amar en tiempos revueltos”, ese fue el inicio concreto porque la idea la teníamos desde hace mucho tiempo, ya que habíamos trabajado en conjunto pero no juntos los tres, llevábamos pensándolo desde hace tiempo y estábamos esperando el instante adecuado, entonces murió la mamá de Marta, fuimos al tanatorio y estuvimos mucho con ella y a raíz de esas conversaciones surgió el hecho concreto y las reuniones… La que más se lanzó a la piscina fue Marta, que necesitaba algo bonito que le pusiera las pilas y habló con Zenón Recalde el director, él embarcó a César Belda y nos pusimos a ensayar mucho mientras ella hacía “Cinco Horas con Mario” en el Arlequín, donde fue la primera reunión.
-Y con todos los desafíos que conlleva, está siendo una gran alegría.
La verdad es que si que está siendo una alegría dentro de lo difícil que es hacer una producción propia, sin tener que limitarte o imponerte a lo que un productor te dice, claro que con toda la lógica del mundo. La idea era que lo pudiésemos sacar adelante nosotros para poder añadir y cambiar lo que quisiésemos depende de los trabajos de los tres que hemos tenido hasta ahora y es difícil la verdad, estamos conociendo una visión del mundo que desconocíamos totalmente, lo cuál está muy bien porque aprendes muchas cosas y valoras mucho lo que está bien hecho cuando estás trabajando con alguien, y eres un poco más benévolo con las cosas que se hacen mal, como enseñanza nos está viniendo muy bien y en lo personal lo estamos disfrutando mucho, es un subidón lo que pasa arriba del escenario y lo que pasa abajo nos da un alegrón cada noche.
-Es una obra en la que el público influye muchísimo…
El público lo es todo, cuando haces teatro de texto lo que más te dice de lo que le está pasando al público es el silencio, pero cuando haces este tipo de obra y de teatro, si no tuvieras respuesta inmediata… te irías viniendo abajo un poquito. La respuesta es desde el segundo 0 de entrega total y comprenden muy bien la historia y la propuesta, y a nosotros nos pone las pilas al máximo.
-Vamos, que cualquier mal día se arregla totalmente….
Pero totalmente, nosotros hemos tenido días con funciones muy duras porque venías con cosas de casa y en esta obra estás muy desnudo porque eres tú mismo y estamos solitos con el pianista, y tiene otro peso, tienes que tirar del carro con toda la fuerza y ha habido días muy duros de estar mal, la última función la hicimos los tres con un gripazo muy fuerte, y tenemos que estar con los cinco sentidos al cine por cien, requiere mucha entrega.
-Cada día es diferente por unas cosas o por otras…
Pero eso ocurre siempre, cada día es distinto: como te sientes tú, la respuesta del público, la de tus compañeros, como estás de la garganta… es completamente diferente, pero si es verdad que siempre nos lo pasamos muy bien.
-Y más siendo un viernes, que parece que hacéis al público entrar con otra energía al fin de semana…
Sí pero fíjate que lo estuvimos haciendo los lunes en el Nuevo Alcalá y la respuesta era idéntica, además es que te lo dice gente muy variopinta: gente mayor, gente joven, gente de la profesión, gente que no sabe nada de la profesión y va de público totalmente de nuevas… y todos los disfrutan mucho, está siendo una experiencia muy gratificante, el otro día vino a vernos una actriz muy reconocida y a la que respetamos mucho y nos dijo unas cosas… Dijo que desde el primer momento en que aparecemos, se crea una magia que invita a pasarlo bien desde el primer momento, y todo lo que pasa se agradece.
-Además que son vuestras cosas y anécdotas y no podría hacerla nadie más…
Ese es el riesgo: que no podemos hacerla más que nosotros, ya hemos tenido que pararla una vez casi dos meses, ahora otra vez, y bueno va a ser algo que va a ocurrir pero sabemos que es algo que estará siempre vivo en cartera e incluso iremos modificando según todo lo nuevo que nos ocurra en nuestra vida y nuestras carreras profesionales, además ya tenemos unas cuantas pensada y muchas ganas de meter cosas nuevas y cambiar algunas, aunque cuesta recortar, porque todo funciona muy bien y nos da como miedo porque son como piezas engranadas, pero tenemos varias cosas que nos apetece mucho a los cuatro añadir.
-También tuvo que ser complicada la selección de los temas…
Eso si que fue una gran labor, sobraron veintidos mil, son muchos años de trabajo ya… Da para mucho, llevamos trabajando mucho en cosas muy distintas desde que eramos unos críos, hemos pasado por matrimonios, separaciones, éxitos, fracasos, épocas de abundancia, de escasez… como la vida misma, pero la vida y la profesión del artista es especialmente vulnerable, hasta hace poco era la nuestra pero ahora desgraciadamente todas.
-Pero vosotros sois muy positivos…
Es con lo que hay que quedarse, si no, no te mueves de casa.
-Además habéis añadido canciones de vuestros musicales anteriores…
Sí, la idea para elegir los temas que tenían que estar evidentemente tuvimos en cuenta los musicales en los que habíamos trabajado, luego con los que nos hemos quedado con ganas de trabajar en ellos y pequeñas anécdotas por trabajitos por donde hemos pasado y ese homenaje al bolero en el que le fuimos dando forma en ese momento de la radio de los años 40 y que es de los que más éxito tienen para nuestra sorpresa.
No sabíamos si iba a hacer gracia o no, si se iba a entender que era un homenaje al bolero… pero los primeros sorprendidos fuimos nosotros.
-¿Y cómo sentís el cambio de teatros en vuestro espectáculo?
El espectáculo ya está mucho más rodado, hemos ido por muchas ciudades y teatros muy diferentes, desde grandes, pequeños, espacios al aire libre… Ha funcionado en todos, pero de cada sitio ha quedado un poquito, y de repente entrar en este teatro (Infanta Isabel) con gente que va a vernos siempre, que nos recomienda, en este teatro con un tamaño perfecto, con esos palcos dorados antiguos de la época parisina, con esa magia, esos colores, esa cercanía… Estás en teatro, porque el Alcalá era una propuesta escénica muy bonita y diferente, pero aquí tampoco pierdes la cercanía con el teatro. Hay veces que hemos tenido que sacrificar esa cortina plateada que nos la revendieron de un musical precioso que se hizo, así que tiene su historia y magia, pero la escenografía no es nada, es más la historia y el repertorio que hemos elegido.
-Además que emocionáis, divertís…
Esa es la magia que tiene el espectáculo, te lleva a reír, a llorar, a olvidar las penas que te quedan fuera, descubres la parte humana de los personajes que ves arriba… es muy bonito lo que despierta en la gente y nos transmite.
-¿Tienes alguna secuencia favorita?
Es que me lo paso muy bien todo el tiempo, se me hace cortísimo, hay muchos momentos maravillosos donde tienes un subidón y no falla nunca, no podría elegir uno, tan solo sería cuando estoy entre cajas viéndolas a ellas, disfruto mucho sus solos desde dentro, tranquilo pero con el nervio de estar trabajando, son dos grandes artistas y poder compartir esto con ellas…
-¿Te gustaría interpretar tú alguna de sus canciones?
Las que cantan ellas son de mis canciones favoritas también así que sin duda, las cantaría en cualquier lugar.
-¿Tienes en mente alguna canción más para meter en el espectáculo?
Hay muchas pendientes, lo que pasa es que hay que respetar un guión… Lo hemos hablado mucho con Zenón para encontrar el lugar exacto y meterlo. Tenemos dos o tres momentos posibles que caerán en seguida.
-¿Quizás alguna de tu disco?
No, no pegan en el espectáculo, tenemos pendiente un homenaje a dos grandes musicales en los que nos hubiese gustado trabajar enfocados de manera divertida y confío en que caiga. Las del disco son música pop y tampoco significan mucho en mi vida personal como para meterlo y tendría que sacrificar el momento Serrat. Es un placer cantarle y que te guste lo que hace tanto… cuando te pones a versionar da un poco de miedo, pero esa canción ya la había testado en otro espectáculo hace un par de años y sabía que a la gente le volvía loco, le da una magia y un realce que no tenía.
-¿Ha influido mucho Serrat en ti?
Serrat ha influído en todos los amantes de la música hispanohablantes, es el gran poeta de la música en español reciente junto a Sabina, aunque son como la noche y el día, uno es como el aspecto urbano y el otro el romántico-filosófico, son como dos complementos opuestos, son los dos muy grandes.
-¿Tienes en mente sacar algún otro trabajo discográfico?
Estamos con la idea de grabar el disco del espectáculo, nos da mucha pena que no se registre y la gente lo pueda tener.
-Además que ha sido todo un reto embarcarse en esta producción solos, aunque tú ya tenías experiencia previa…
Yo sí, he producido cosas de pequeño formato, he dirigido obras, me he lanzado mucho en festivales de teatro, en actividades culturas por el teatro de la identidad… para mí no era tan nuevo como para ellas, ellas tenían un poco de miedo al principio sobre como crear algo desde 0 sin un personaje y un guión, entraron en el juego en seguida, se divirtieron mucho y entraron en el juego muy bien… si no te lanzas a contar tus historias no sería igual de cercana, personal y divertida. Es el gran problema, que somos nosotros y no puede haber sustitutos.
-¿Y cuál ha sido para ti el mayor desafío y el mayor placer?
El mayor desafío es salir a un escenario haciendo de ti mismo, nunca me lo había imaginado por lo más remoto, y el mayor regalo es cada noche que lo hacemos sin ninguna duda.
-¿Algún reto pendiente en tu carrera?
Muchísimos muchisimos, pero ninguno en concreto, me hubiese encantado hacer al Capitán Trap de Sonrisas Lágrimas y estuve a punto de poder hacerlo, pero no me quedo con las cosas que no salen, te quedarías con una depresión crónica… pero es un personaje que todavía tengo edad y que se repone cada cierto tiempo, alomejor algún día llega la oportunidad de hacer ese personaje que me enamoró de los musicales, yo creo que es la película que más veces he visto. Pongámoslo en condicional: Me gustaría.
-También participaste en uno de los mejores musicales: «Mamma Mia».
Eso fue mágico total, es casi seguro que no se vuelva a repetir: hacer tres años seguidos el mismo trabajo… quitando “El Rey León”, y aún así tampoco, porque renuevan cada muy poco tiempo. Estar de martes a domingo haciendo doblete diario, es muy difícil que se pueda repetir, se hizo como una familia y el teatro y el barrio era casi tu casa, como ir a la oficina, a la fábrica… Y luego un subidón diario con el público de pie con ese subidón de adrenalina, conocer a los Abba y que te vieran trabajar, te saludaran, hablar luego con ellos… Es inolvidable completamente.
-Tuvo que ser también agotador…
Un musical largo de dos horas cuarenta y cinco minutos sin parar, con muchos números musicales y coreografías que parecían sencillas pero eran complicadísimas, con mucho texto… era muy cansado.
-Con temas inigualables… ¿Podrías escoger un tema de Abba?
Me pasa como con el espectáculo, son tantas y tantas…. pero si tuviera que escoger alguna para escuchar me gusta mucho “The Winner Takes it All”, cuando la he intentado cantar reconozco que no he sido capaz de sacarle todo lo que se le puede sacar a esa canción, y para cantar me quedo con “Gracias por la música”, y luego temas que no fueron tan conocidos pero que son maravillosos.
-También comenzaste con “My Fair Lady”…
Nos marcó completamente, fue un sueño. Conseguir tu primer trabajo, pasar un casting, de repente estar en la escuela y comenzar a dar pasitos, entrar en una obra así y con un elenco como aquel… La primera vez de todo, te marca para bien o para mal, y aquello nos dejó una huella indeleble evidentemente.
-Una forma de empezar a lo grande…
Totalmente a lo grande.
-Cambiando de campo también has formado parte de grandes series como “Amar en tiempos Revueltos” y “Cuéntame como pasó”…
Cuéntame y Amar es de lo que me ha gustado hacer en televisión y son dos personajes totalmente distintos. Tuve la suerte de trabajar con dos compañeras sublimes: Ana Duato y Natalia Millán, además de trabajar en dos series más emblemáticas y de referencia de la televisión nacional, fue un regalo, y trabajar con ellas fue una conexión desde el principio hasta el final fabulosa. Me dio pena que mi personaje de Cuéntame no durase más, se le podía haber sacado mucho más, y no dejas de ser más que un peón en un tablero.
-¿Y qué le pides a este 2014?
A este 2014 le pido un buen personaje en televisión egoístamente, porque es lo único que te permite ahora mismo llenar un patio de butacas y en nombre de este proyecto que queremos tanto me gustaría un buen personaje de esos que te marcan para bien.
Recomendaciones:
Libro: “El Muchacho Persa” de Mary Renault.
Artista: Roberta Flack.
Película: “La vida de Adelé”.
Obra de teatro: “El veneno del teatro” de Daniel Fraire y Miguel Ángel Solá.
Esther Esteban, Madrid